Los distintos modos de conducción disponibles en su automóvil se adaptan a diferentes situaciones y tipos de conducción. Dependiendo del modo de conducción que seleccione, pueden verse afectados determinados elementos de la conducción, como la dirección, el frenado y la aceleración. El consumo de combustible y la autonomía estimada del automóvil también se ven afectados.
El automóvil tiene tres modos de conducción:
Estándar | Este es el modo predeterminado y se recomienda para el uso diario. También se selecciona automáticamente cada vez que arranca el automóvil. |
Autonomía | Este modo limita la climatización y la potencia para maximizar la autonomía. |
Rendimiento | Con el modo de rendimiento, el automóvil prioriza el rendimiento por encima de la autonomía, lo que permite una experiencia de conducción más activa y dinámica. |